"...Greco y la nuevamente fantaseada materia de los paños que repugnan al cuerpo y tienen existencia propia y actúan como realidad embarazosa y sólida" R.Longhi, Rinascimento fantastico, 1920-22
El Greco, 1541-1614/ trozos de pintura-pintura
Es el IV Centenario de Doméniko Theotocópulos, El Greco ( Creta,1541-Toledo 1614) artista reconocido en vida y después casi olvidado hasta fines del XIX. Pintor y hombre de pensamiento, con una educación humanista, como indican su biblioteca, amistades y las anotaciones que dejó en los libros de Vitruvio y Vasari .
Pertenecía a una familia acomodada de la minoría católica dentro de la sociedad ortodoxa de la isla y se formó en el estilo rígido y plano de la tradición bizantina de iconos. Aprendió el oficio y ejerció como pintor durante seis años en Candía,su ciudad. En 1568 se trasladó a Venecia. Iba dispuesto a aprender un nuevo lenguaje pictórico asimilando las ideas renacentistas. Bajo la influencia de los maestros venecianos, Tiziano y Tintoretto, sobre todo, su estilo da un cambio radical :
-renuncia a los fondos dorados,
-las figuras ganan peso y volumen
-construye el espacio según la perspectiva renacentista abandonado la bidimensionalidad bizantina, que él nunca había seguido de forma radical
-el óleo sustituye al temple y adopta el color suntuoso y la luz de la Escuela Veneciana...
En 1570 viaja a Roma, donde estudia la obra de Miguel Ángel muerto siete años antes. La pintura del florentino es tan opuesta a la veneciana que El Greco afirma que Miguel Ángel no sabe pintar, aunque le influyen su monumentalidad y arriesgados escorzos...
El Expolio,(detalle) el intenso rojo de la túnica se refleja en la armadura...
En Roma hay demasiados artistas y el trabajo escasea sus amistades de la colonia española le informan de las posibilidades que ofrece la construcción de El Escorial que se está llevando a cabo entonces y hacia 1576 Domenico Theotocopoulos llega a España.Tiene 36 años y vivirá en Toledo 37 más, hasta su muerte.
Existe una carta de Tiziano a FelipeII en que el pintor escribe" un griego de gran valía, discípulo mío"que pudiera referirse a El Greco recomendándole. Logra que el rey le encargue un gran cuadro y pinta el Martirio de San Mauricio que no parece agradar al monarca. El tema se adecuaba a las recientes directrices del Concilio de Trento - emplear asuntos capaces de conmover a los fieles- pero no el tratamiento, intelectualizado y la forma desconcertante e innovadora, más propicia para producir asombro que piedad.
Felipe II, el mayor coleccionista de El Bosco y Tiziano que fue el "pintor de cámara " de él y su padre- debió apreciarla porque pagó generosamente pero no volvió a llamarle. Se instaló definitivamente en Toledo, donde no le faltarán encargos de la nobleza y del alto clero entre los que quedaban rescoldos de la renovación religiosa de Erasmo y una religiosidad intimista y mística que convive soterrada con los rigores de la Contrarreforma y previene, a pesar de la Inquisición, contra una interpretación sin matices de la religiosidad de la época.
Vista de Toledo,h1598,ó/lz, 122 x 108, Metropolitan N.York
Toledo es un lugar mágico; por la topografía, por la antigüedad acumulada y la diversidad histórica que se adensa en una gravitación especial. Las callejuelas empinadas,la judería, la sinagoga, la mezquita, las iglesias y una catedral gótica monumental -que trasgrede todas las leyes del Gótico y está tan llena de riquezas artísticas en el interior que se estorban unas a otras. La ciudad está ceñida por el Tajo y el río permite una vega fértil en medio del secarral que la rodea. Toletum, la llamaron los romanos que vencieron la resistencia celtibérica el año 193 a.C y permanecieron mientras duró el Imperio,casi 500 años. Luego fue capital de los visigodos y dominio musulmán desde 711 hasta 1085 en que la rindió Alfonso VI.
Musulmanes, judíos y cristianos, convivieron a partir de 1085 , posiblemente no idílicamente como pretende la leyenda , pero sí manteniendo una vida intelectual activa y fructífera, que trasmitió al mundo medieval europeo la sabiduría de los autores greco-latinos -Aristóteles entre ellos- a través de múltiples traducciones al árabe, hebreo, latín y romance.
Durante la época de Carlos V fue una de las capitales del Imperio, y aunque perdió peso político y social al fijar Felipe II la capital en Madrid en 1561, siguió teniendo gran importancia religiosa como sede del Primado de la Iglesia y en ella en 1529 había muerto el humanista italiano Baltasar de Castiglione.
El Expolio,ól/lz, 1577-1579, 285 x 173 cm, Toledo, Catedral.
Fue un encargo del cabildo de la Catedral para la Sacristía Mayor. Antes de la Crucifixión un esbirro despoja a Cristo de las vestiduras. Aparece sólo en el evangelio apócrifo de Nicodemo. En el ángulo inferior izquierdo, las tres Marías. y en el derecho un papel con la firma. Cristo es el eje de la composición y la túnica de rojo veneciano y pliegues de agresivo antinaturalismo domina la pintura. Le costó cobrar el encargo; el cabildo se resistía a pagar 900 ducados, escudándose en que el tratamiento no era muy ortodoxo y las tres Marías no eran citadas en los Evangelios canónicos.
Todavía es el pintor veneciano y su aprendizaje del color, la perspectiva y la proporción se mantienen, aunque debilitados por rasgos manieristas como la fórmula iconográfica de origen bizantino, la irracionalidad del espacio opresivo, la multitud abigarrada en torno a Cristo,...el cielo sólido como mármol que se ve entre las picas...
La intensa mancha roja del manto domina el espacio inmantando la mirada del espectador . No responde a ningún modelo naturalista, a tela ninguna. Como tantas veces en el Greco es un trozo de pintura -pintura, con vida propia, un puro objeto plástico, muy cercano a la abstracción. Mirándola surge la idea de que Velázquez, entre cuyas pertenencias había tres Grecos, luego le valoraba- la evoca y rinde homenaje cuando en La fragua de Vulcano, -un cuadro de naturalismo palpitante-, pinta la túnica del dios Apolo. También trae al recuerdo al gran Eduardo Chillida que en una de sus últimas entrevistas señalaba que el 90% de la pintura occidental eran pliegues y describía su fuerza expresiva.
Martirio de San Mauricio, 1580-82, ól/lz, 448 x301. El Escorial.
El Greco eligió un episodio de la Leyenda Dorada de tiempos del emperador Diocleciano; San Mauricio al mando de la Legión tebana es ejecutado junto a sus legionarios por negarse a ofrecer sacrificios a los dioses.El pintor abandona el estilo aún veneciano de El Expolio y al tiempo contradice los principios fundamentales de representación desde el renacimiento, como la unidad de acción, (San Mauricio aparece más de una vez) y deja aflorar con fuerza el sustrato bizantino. En la parte celestial los mártires son recibidos por figuras angélicas con símbolos del martirio en unos escorzos y luces prodigiosos.
La naturaleza como modelo se debilita, como las proporciones y la armonía renacentistas, y el sentido del espacio, que deja de ser racional y se vuelve impracticable. En la parte superior se tiende a la desmaterialización, espiritualización de los cuerpos en transparencias visionarias y fantasmales. Las figuras tienden al canon alargado que le caracterizará.
Se deshace de reglas y pinta con entera libertad. Se sostiene que era un neoplatónico y que como Plotino, a quien leía, no creía que la belleza residiera en la armonía,ni que el arte fuera sólo imitación de la naturaleza y que era más importante lo que a la forma aportaba el propio artista.
Entierro del conde de Orgaz, 1586-88, ól/lz, 480 x360. Iglesia de Santo Tomé, Toledo
El entierro del conde de Orgaz, un"retrato de grupo" que representa el entierro del conde fallecido en 1327 transportado por San Esteban y San Agustín en presencia de un varios caballeros toledanos mientras su alma -en forma de niño translucido-, asciende al cielo. Sólo el párroco de Santo Tomé presencia el ascenso
La parte inferior, de estilo naturalista, detallista y realizado con calidades y texturas "realistas", es también una galería de retratos, autorretrato incluido, [en la mitad izda. la cabeza que está sobre la mano de otro caballero toledano es El Greco]. La parte celestial , visionaria y. prodigiosa , -desde la composición de la pirámide en escorzo que contiene a Cristo, María y San Juan Bautista (la Deèsis bizantina)- hasta las nubes de "mármol", el faldellin "metálico" del ángel, la luz lunar que envuelve la escena y enfría aún más los colores ácidos...En la parte inferior emerge el mundo de Venecia, incluido Tiziano.
Entierro del Conde de Orgaz, [detalle]
El sobrepelliz del párroco de Santo Tomé, -que contempla el prodigio y es el único que ve ascender al alma translúcida del Conde-, está realizado con finas veladuras y gran talento. Es otro de los numerosos "trozos de pintura-pintura" que se individualizan como puro objeto plástico por la intensidad pictórica que trasmiten, al margen de lo que representen, frecuentes en El Greco.
Los años de Venecia serán definitivos y a pesar de posteriores evoluciones, del fermento interior bizantino, o de los matices que pudiera añadir la inmersión en una sociedad tan intensa por sus mezclas -étnicas, culturales, religiosas...- como la toledana, siempre será un pintor veneciano por cómo utiliza el color y la luz, a pesar del uso a menudo de colores fríos y ácidos y de luces de destellos y fulgores helados, a la manera de Tintoretto.
Crea un universo apasionado, original y lleno de tensión plástica. A menudo en sus pinturas se individualizan esos trozos que reclaman una mirada activa.Un detalle se separa del conjunto, adquiere protagonismo y destaca como "puro objeto plástico": ya no es una túnica, o un sobrepelliz, o una nube o un volumen tratado como un vacío- es sólo un trozo de pintura-pintura elocuente , algo muy cercano a la abstracción más expresiva.
Fue un gran retratista , no lejano de Tiziano o Tintoretto y en sus abundantes obras religiosas de exaltado misticismo, los temas posiblemente reflejen el gusto y los deseos de sus clientes, aunque parte de la espiritualidad que expresan debió pertenecerle.
De los pintores del Manierismo, --el periodo anticlásico que se sitúa entre el Renacimiento y el Barroco--, El Greco fue el más grande, por su invención, por cómo transgredió todas las reglas y utilizó el color, la luz y el misterio. Comenzó a avanzar pronto en un estilo solitario que siguió a la naturaleza cuando le convino o la ignoró para hacer evidente otra realidad y tomó siempre caminos arriesgados.
Oración en el Huerto,1590, ól/lz,102 x 132. N.Gallery
Los volúmenes realizados como vacíos crean estructuras fluidas y dinámicas . Fue muy admirado por los pintores del Expresionismo y el Surrealismo, y en muchas de sus imágenes se encuentran tratamientos de composición, figuras, color, luces... , -como en este lienzo-, que se acercan a lo onírico en parte por su intenso misticismo..
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Sanchez Cotán(1560-1627) pintor de "bodegones"
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